lunes, 9 de septiembre de 2019

desobediencia civil thoreau

Nos vamos a plantear la forma cómo consumimos  nuestra existencia.

Un individuo ambicioso, grosero y violento de las afueras d nuestra población va a construir un muro al pie de la colina rodeando su propiedad. Las autoridades le han inculcado esto en la cabeza para evitar que origine otros problemas y él quiere que me pase tres semanas allí cavando a su lado. Al final, él quizás acaparará más dinero y s elo dejará a sus herederos para que éstos lo despilfarren. Si lo hago, muchos me alabarán por ser un hombre trabajador y laborioso, pero si me dedico a otras faenas que me proporcionan más beneficio, aunque menos dinero, comenzarán a mirarme como a un vago.

Si un Hombre pasea por el bosque por gusto todos los días, corre el riesgo de que le consideren un Holgazán, pero si dedica el día entero a especular cortando bosques y dejando la tierra estéril antes de tiempo, se le valora por ser un ciudadano trabajador y emprendedor. ¡Como si una población no tuviera má objetivo en sus bosques que el de cortarlos!

Los caminos por los que se logra dinero, casi sin excepción, nos amenguan. Haber hecho algo por lo que tan sólo se percibe dinero es haber sido un auténtico vago o peor quizás.
SI un obrero no gana más jornal que el que le paga su patrón, le están engañando, se engaña a sí mismo.
Si ganaras dinero como escritor o conferenciante,  sería que eres popular, lo cual trae consigo un descenso perpendicular.
Esos servicios por los que la comunidad está más dispuesto a pagar, son los más desagradables de cumplir.
Se te paga para que seas menos que un ser humano.

Es significativo que existan pocos hombres tan bien empleados, que trabajen tan de acuerdo con sus intereses, que un poco de dinero o fama no les arranque de su tarea actual.

Un individuo eficiente y valioso hace lo que sabe, tanto si la comunidad le remunera por ello como si no le retribuye. Los ineficaces ofrecen su ineficiencia al mejor postor y están siempre aguardando que les concedan un puesto.

Hasta ahora voy teniendo éxito , pero preveo que si mis necesidades aumentan demasiado, el trabajo requerido para satisfacerlas se convertirá en una labor penosa.

Lo que pretendo sugerir es que un individuo puede ser muy trabajador y en cambio no utilizar bien su tiempo.

La grandeza no se aproxima al que siempre mira al suelo; y todos los que miran a lo alto , se están empobreciendo.

El frío y el hambre me parecen más consecuentes con mi naturaleza que esos métodos que han adoptado mis colegas.

INTERESADOS

CONTENIDO